Productos hortícolas en el Valle del Loira

De la tierra al plato

Conocido como “el Jardín de Francia”, el Valle del Loira es famoso por su horticultura

El espárrago es un producto emblemático del Valle del Loira. © OTBC

El jardín de Francia

La feliz conjunción de un clima suave y templado con tierras arenosas, ricas en limo, ha convertido al Valle del Loira en el “jardín de Francia”. Todas o casi todas las frutas y verduras crecen en esta región privilegiada: puerro, cebollas, calabacines, apio, lechuga, coliflor, champiñón común, fresas, manzanas, peras, melón… y el rey del lugar, el espárrago, verde de Chambord o blanco de Sologne.

Este último ha forjado la fama de las legumbres de la región. Cultivado hoy en una superficie de unas 200 hectáreas, es uno de los productos de excelencia de las mesas locales. En L’Assa, uno de los mejores restaurantes de Blois, se lo sirve asado. «Su ligero sabor a avellana combina a la perfección con las carnes blancas, los pescados y hasta con los caracoles», nos cuenta el chef Anthony Maubert con una sonrisa.

 

Espárragos, fresas, grosellas negras y hasta azafrán se producen en el Valle del Loira.

La región defiende fervorosamente su reputación hortícola. Hace un siglo y medio, los parisinos se deleitaban ya con las fresas de Sologne. Únicamente en el departamento se cultivan hoy más de 3.000 toneladas. La Mara des bois (de solo nombrarla se nos hace la boca agua) es la embajadora más golosa.

El Valle del Loira también es la primera región productora de grosella negra (5.000 toneladas), muy por delante de Borgoña (2.000 toneladas). Menos conocidos por el público en general, los cultivos de azafrán y de ñames, tubérculos que en Francia solo se producen en el departamento de Loir-et-Cher, también figuran entre los productos emblemáticos del territorio.

La venta directa cada vez más presente

Como en el resto de Francia, la comercialización en circuito corto experimenta un importante desarrollo. Hoy en la región, se calcula que un 30 % de las explotaciones hortícolas practican la venta directa en granjas y mercados, a través de las AMAP (Asociaciones para la conservación de la agricultura campesina), las organizaciones nacionales (Bienvenue à la ferme, La Ruche qui dit oui) o locales.

Citemos también Baladodrive. fr, una web nacida de la unión de agricultores y artesanos locales que facilita el acceso de los consumidores a los productos de calidad, locales, frescos y de temporada, o Les Paniers Bio du Val de Loire, que distribuyen de Blois hacia París, en Île-de-France, o en el departamento de Loiret, cestas de verduras y frutas 100% orgánicas, producidas en las fincas de la región Centro.

Otra iniciativa original: hace cuatro años, Daniel Pasquier, horticultor de Cour-Cheverny, instaló un distribuidor automático de verduras frescas a la entrada de su localidad. Las verduras están disponibles en lotes o en pequeños paquetes surtidos, ideal para la confección de cocidos. La máquina expendedora cuenta con 32 compartimentos reabastecidos dos veces al día.